Pues de vuelta de París, os traigo algunas fotitos de mi visita a la ciudad del amor...
Pero antes... una tarta a la crema de ron con decoración parisina y muy colorida.
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No creáis que es complicada porque en absoluto... Eso sí, se te tiene que dar más o menos bien pintar jeje.
Pero no con pintura sino con crema, deliciosa buttercream de ron de múltiples colores.
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Sólo hay que hornear el bizcocho, preparar el buttercream y colorearlo con los tonos que vayamos a necesitar en nuestra "pintura".
Yo encontré una imagen parecida en google de la Torre Eiffel y me encantó la idea de plasmarla en la tarta.
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Metemos cada color en una manga pastelera y "pintamos" nuestra tarta... Como si fuese al óleo.
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Es mi segunda visita a París y tengo que reconocer que aunque tengo devoción por la ciudad de Londres por todo lo que representa para mí... París sin lugar a dudas es la ciudad más bella que he visto nunca.
Es imponente, espectacular, preciosa, romántica, contundente, majestuosa... Sin palabras.
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Y mi mayor alegría es que mis padres por fin hayan conocido alguna ciudad europea y que haya sido sin duda la más impresionante de todas. Feliz sin más.
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Espero que os gusten las fotitos del viaje y la tartita para celebrarlo.
Besos con amour!
Pero antes... una tarta a la crema de ron con decoración parisina y muy colorida.
No creáis que es complicada porque en absoluto... Eso sí, se te tiene que dar más o menos bien pintar jeje.
Pero no con pintura sino con crema, deliciosa buttercream de ron de múltiples colores.
Sólo hay que hornear el bizcocho, preparar el buttercream y colorearlo con los tonos que vayamos a necesitar en nuestra "pintura".
Yo encontré una imagen parecida en google de la Torre Eiffel y me encantó la idea de plasmarla en la tarta.
Metemos cada color en una manga pastelera y "pintamos" nuestra tarta... Como si fuese al óleo.
Os pongo algunas fotitos de París: la Torre Eiffel, los Macarons de Montmartre, Mouline Rouge, la Iglesia del Sagrado Corazón, Notre Dame, la preciosa tienda de Ladurée en la cual probé esos famosos macarons, la iglesia de Madeleine, el Arco del Triunfo, mis padres en el Louvre y con mi marido en la Ópera, el edificio a Los Inválidos y el centro comercial Lafayette con estilosos macarons.
Es mi segunda visita a París y tengo que reconocer que aunque tengo devoción por la ciudad de Londres por todo lo que representa para mí... París sin lugar a dudas es la ciudad más bella que he visto nunca.
Es imponente, espectacular, preciosa, romántica, contundente, majestuosa... Sin palabras.
Y mi mayor alegría es que mis padres por fin hayan conocido alguna ciudad europea y que haya sido sin duda la más impresionante de todas. Feliz sin más.
Espero que os gusten las fotitos del viaje y la tartita para celebrarlo.
Besos con amour!